“Hasta el infinito y más allá”
Unos dirán que no, otros que bueno, y la gran mayoría, decimos que el éxito de una marca está sí o sí en la fortaleza de la conexión emocional con sus consumidores.
A esto se le ha llamado en términos marketinianos, Brand Love. No son ni clientes ni consumidores, son fans de tu marca. Verdaderos supporters, fieles y convencidos de que lo tuyo es lo mejor y que te harán de embajadores haya donde vayan.
Pero como ya sabrás, esto no es tarea fácil. En ningún sector, ni en ninguna marca. Y con las nuevas generaciones de consumidores, más volátiles que nunca, lo mejor es armarse de paciencia.
Primero has de encontrarlos, definir muy bien quiénes son, donde están y qué esperan de una marca como tú. Después, tienes que saber despertar su interés, atrayéndolos no solo con una gran oferta, sino con un ecosistema de intangibles que les generen valor. Y una vez que los tienes, es necesario cuidarlos. Serán fieles, si eres honesto, no les olvidas y les ofreces algo relevante y diferencial respecto al resto de productos o servicios de la competencia.
Tus Brand Lovers son por tanto tu mejor asset, pero ¿son tan fieles como creemos?
Pues según el IV Estudio de Marketing Relacional realizado por Mediapost en colaboración con la Asociación de Marketing de España publicado este año, el 74 % de los consumidores asegura tener una marca preferida, aunque solo el 8% es fiel a una única marca.
Y ¿qué pasa en el sector de la automoción?
En este caso, la fidelización depende de la marca y debemos de tener en cuenta el factor de fiabilidad del vehículo que, según la última encuesta publicada por la OCU sobre satisfacción de los clientes en el sector de la automoción, es el criterio que más pesa en su decisión última de compra.
Mercedes Benz, Citröen y BMW son las que obtienen un mayor índice de fidelización, según un estudio realizado este año por la plataforma de venta de vehículos online Carwow, con un 59%, 58% y 54%, respectivamente, de consumidores dispuestos a renovar coche con la misma marca.
Diríamos, por tanto, que en determinadas marcas del sector de la automoción, sí se ha construido una conexión emocional duradera, sí existe ese amor “incondicional” y que buena parte de los players están jugando bien sus cartas reteniendo a sus consumidores dispuestos a seguir ejerciendo de embajadores “hasta el infinito y más allá”.
Y en esa estrategia, cuyo éxito está indudablemente vinculado a la calidad y la fiabilidad del producto, la experiencia de cliente y al acompañamiento en todo el periodo postventa, también debemos de poner el foco en los territorios en los que cada marca está presente. Ahí se apalancan muchos de sus valores, facilita la identificación cliente-marca y posibilita que los consumidores puedan vivir experiencias únicas.
Ahora que tenemos a muchos “pillados”, busquemos fuera unos pocos más.
En japonés, hay una expresión, Koi No Yokan, que no tiene traducción literal al castellano, pero que significa algo así como “una premonición de que al ver algo por primera vez, vas a acabar enamorado de ello”.
Eso es lo que nos proponemos en 4foreverything, atrapar con las emociones a aquellos consumidores que todavía no se han fijado en nuestros clientes. Que gracias a nuestras activaciones de marca y eventos, podamos despertarles esa curiosidad para que empiecen a notar las mariposas en el estómago.